Alrededor de 70 personas debieron dejar el lugar, que contaba con subdivisiones y cámaras de televigilancia.
Carabineros, con el apoyo de efectivos de seguridad de la Municipalidad de Santiago, concretó esta mañana el desalojo de más de 70 personas desde cuatro inmuebles que estaban tomados en el Barrio Yungay, los cuales eran conocidos por los vecinos como La Ciudad de Dios.
El contingente policial, integrado por efectivos del GOPE y de Control del Orden Público (COP), acudió a primera hora hasta las viviendas situadas en la calle San Pablo, entre Bulnes y Cautín.
Entre los inmuebles desalojados destacó una que llevaba alrededor de cuatro años tomado por ciudadanos extranjeros. La casona incluso contaba con un moderno sistema de televigilancia.
El lugar más peligroso
“Estamos en un operativo muy importante en la comuna de Santiago. Es el lugar más peligroso que se había identificado de la comuna de Santiago. Muchas veces los medios o vecinos y vecinas habían llamado a este lugar como La Ciudad de Dios o la favela“, manifestó la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler.
Recordó que en ese sector del Barrio Yungay se reportaron cinco homicidios entre 2023 y lo que va corrido del 2024, y precisó que los últimos dos ocurrieron en enero pasado.
La jefa comunal dijo también que quienes se tomaron los inmuebles efectuaban un “subarriendo extorsivo”.
Al respecto, el prefecto de la Prefectura Santiago Central de Carabineros, coronel Fernando Albornoz, precisó que la extorsión se concretaba porque “mes a mes empezaban a elevar los precios, pero exigiendo el pago anticipado de los subarriendos“.
Detalló además que el recinto contaba con hasta 70 subdivisiones en su interior.
Contaba con aparatos de vigilancia
Por su parte, la delegada presidencial de la Región Metropolitana, Constanza Martínez, precisó que “son terrenos grandes que están subdivididos al interior, sin condiciones de habitabilidad, con un nivel de peligro muy grande para las personas que viven ahí“.
Según confirmó, el lugar contaba con vigilancia tanto por parte de personas como de cámaras de seguridad, “lo que ayuda mucho a poder ocultar armas, drogas y generar incivilidades“, aseguró.
Se trata del desalojo número 18 de casas tomadas en la comuna de Santiago este año, con lo que suman 46 desde que la Municipalidad inició esta tarea.
