Esta vez no es en Chile, sino que en Brasil, cuyo Gobierno cargó contra la empresa luego de que los cortes de luz se extendieran por más de tres días.
La empresa Enel nuevamente está bajo tela de juicio, y esta vez no en Chile, sino que en Brasil, donde ocurrió un apagón que dejó a más de 1.5 millones de personas sin energía eléctrica en Sao Paulo, cuya cifra ahora bajó a 340 mil.
A raíz de esta situación, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ordenó abrir una auditoria para identificar los fallos en la fiscalización de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel) sobre la compañía eléctrica Enel, luego de que los apagones se hayan extendido por más de tres días en la ciudad.
Bajo este contexto, el ministro de la Contraloría General de la Unión, Vinicius Carvalho, dijo que “parece demostrado” que Enel “no tiene las condiciones para cumplir con la concesión”. Tras estos dichos, se ha especulado con la posibilidad de que se caduque la concesión. Sin embargo, las autoridades han declarado que dicha determinación se tomará “dentro de un proceso administrativo“.
Los problemas de Enel tras el apagón en Sao Paulo, Brasil
Son más de tres días que una gran parte de los habitantes de Sao Paulo se encuentran sin luz. Lo anterior, producto de una fuerte tormenta que se registró el pasado sábado, que además, dejó siete personas muertas y graves daños materiales en la ciudad.
Con respecto a los cortes de luz, estos se produjeron en gran parte debido a la caída de árboles por las fuertes ráfagas de vientos, que llegaron a alcanzar los 107,6 kilómetros por hora.
Al respecto, Enel por medio de sus canales oficiales sostuvo que tramos enteros de la red eléctrica quedaron dañados en algunos lugares, por lo que se debe reconstruir varios kilómetros de la misma, lo cual provoca que la reanudación del servicio tarde aún más.
Este problema no es nuevo para la empresa, puesto que en Chile, también tuvieron diversos problemas con los cortes de luz en este invierno a raíz de los temporales. De hecho, hubo sectores de la RM que no tuvieron suministro eléctrico por casi una semana, lo que hizo que el Gobierno de Boric les diera un ultimátum.